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Número 6 - Noviembre 2003

Fertilizaciones, filiaciones y otras demandas

Betina C. Macagno


El hecho de que hoy sea posible todo tipo de intervención sobre el cuerpo sin poder anticipar los efectos simbólicos que dicha intervención produce, me generó ciertos interrogantes ligados a hechos coyunturales de la vida cotidiana. Efectivamente,leí en internet noticias tales como que una pareja ,ante la imposibilidad de la mujer para retener embriones , decidió que un óvulo de la misma fecundado con el semen del marido, fuera implantado en el útero de la abuela ( ¿ o la madre?) biológica del bebé.Otra noticia hablaba de una pareja inglesa que había decidido clonar a uno de sus hijos con el fin de poder realizarle un transplante de médula en un futuro.Otra, hablaba de una pareja de mujeres homosexuales que había conseguido tener un hijo del óvulo de una de ellas fecundado in vitro con esperma de un donante anónimo. La pregunta que me interesó responder era la del porvenir de estos niños, sin intención de mi parte de justificar la oposición a tales prácticas en nombre de una naturaleza sabia, cayendo en una suerte de ecologismo psicoanalítico .Pero, uno puede, efectivamente, preguntarse por la ética que motoriza dichos avances científicos,se puede preguntar hasta dónde se puede avanzar en nombre del progreso,esto tiene que ver con el más allá de cada sujeto.De más está decir que jamás Einstein imaginó que en su nombre se tiraría una bomba atómica.

Foucault en La crisis de la Medicina o la crisis de la antimedicina, en la Vida de los hombres infames ( ed. de la Piqueta, Madrid,1990,pág 104) expresa claramente: "La medicina siempre ha funcionado sobre la base de sus propios fracasos e inconveniencias; no existe un gran progreso médico que no haya pagado el precio de las diversas consecuencias negativas directamente vinculadas a ese progreso"

El discurso de la ciencia promete seguir avanzando en lo real lo que amenaza con conmover los cimientos de la humanidad.Las nuevas técnicas reproductivas,la clonación,el genoma humano eran , hasta hace poco, una sofisticación tecnológica inimaginable propias de una película de ciencia ficción. Varias de estas prácticas ponen en jaque el concepto mismo de filiación,ya que en la constitución subjetiva hay determinantes simbólicos que no pueden alterarse,sin ocasionar una estocada a una ética del deseo que respete las diferencias, en este caso , la distinción entre endogamia y exogamia , y las diferencias sexuales.Sostengo que ,si lo simbólico no está alterado, entonces no importa el método utilizado para la concepción biológica de un ser humano.

La Genética solo sabe de la reproducción que genera un organismo vivo en el sentido biológico del término.Nada dice , porque desconoce el tema, del lenguaje,que anuda cuerpo – palabra y goce.La relación de lo simbólico con lo real se plantea sin mediación de lo imaginario, para lo cual excluye al sujeto de la palabra.Para la ciencia no hay sujeto en el origen de la vida, solo hay un saber sobre el programa inscripto en los cromosomas.Nada entiende de que la reproducción no es atribuida a un padre por el sesgo del reconocimiento de un padre real , sino, más bien, por el de un significante.Esto es lo que Lacan sostenía cuando quería mostrar que la familia humana es producto de la cultura : no hay padre que no sea adoptivo,sostenía, y no hay madre que no sea la responsable de hacer existir a un padre como tal.Aún cuando el parentesco biológico pase por el laboratorio discursivo de la ciencia , lo único que cuenta es la incidencia que éstas formas de filiación tendrán en la novela familiar que se construye sobre el axioma " no hay relación sexual"El gran potencial parental como destino irremediable del sujeto no es más que una producción fantasmática que puede ser movilizada.Es el sujeto quien hace el destino de su parentesco adoptivo por excelencia.Por eso, tanto padres adoptivos como aquellos que requierieron de una donación anónima de esperma para convertirse en tales, o las madres que para poder concebir requirieron de una ovodonación, o de una reproducción asistida o del alquiler de un vientre , serán funciones, en tanto el padre es siempre discordante en relación con su función. Es una metáfora .Numerosas figuras pueden venir a suplir su ausencia real. Estas figuras pueden adquirir cierta consistencia en la realidad porque se instalan a una cierta distancia necesaria entre padre real ( siempre carente ) y padre simbólico.

Lacan lo enuncia casi poéticamente al decir : " Ustedes han surgido de esa cosa fabulosa,totalmente imposible que es la progenie generadora, han nacido de dos gérmenes que no tenían ninguna razón para conjugarse, si no fuera por esa especie de chifladura que se ha convenido en llamar amor" .La ruptura que es el resultado del nacer descubre un real que se intenta procesar simbólicamente.

Al corregir la esterilidad la reproducción asistida intenta inscribir a los hombres y a las mujeres en una progenie. Actuando sobre el organismo trata de obtener un efecto sobre lo simbólico. En esta nueva clínica , en la realidad misma de la concepción, se puede ir más allá de todo origen sexual. Es decir, que lo que se realiza en la realidad que es la reproducción que deja por fuera la sexualidad, retorna como una forclusión del origen sexual. Por eso, el actuar sobre la naturaleza de la reproducción asistida parece fundarse en una sorprendente abolición simbólica. Sin embargo,¿ qué pasa con el niño?.No se trata de verlo según cómo ha sido procreado Toda vez que nace un organismo en un medio biológico, le corresponde al sujeto considerarse como producto del coito entre un hombre y una mujer, producto de una reproducción asistida,producto de una donación de esperma, o incluso de óvulos. Al respecto ,Lacan, a la altura del seminario III , va a decir varias cosas respecto de la familia primitiva. Por ejemplo, que en ella se desconocían los vínculos entre coito y procreación es decir , los vínculos biológicos del parentesco. Este último no es reconocido sino mediante ritos que legitiman lazos de sangre, y de ser necesario ,crean vínculos ficticios. Es decir, que el vínculo familiar es simbólico por excelencia. Esto es lo que la ciencia desconoce, o, en todo caso, no le importa Es verdad que uno puede hacerse un análisis genético para determinar la paternidad,por ejemplo, pero el mismo es seguro solamente en el 99,99% de los casos. Vayan ustedes a convencer a un obsesivo del 0,01% restante .Con esto trabaja el Psicoanálisis .Obviamente, no hay nada natural en ser analistas.

Ahora bien,el sujeto se las ingenia para inventar teorías como decía Freud o historias que expliquen la realidad de su concepción.Frente al enigma de su llegada al mundo,el niño inventa sus propias respuestas,que en Psicoanálisis, se llaman teorías sexuales infantiles.La apuesta para el psicoanálisis es escuchar estas respuestas y también aquellas que se inventan en situaciones apremiantes. El niño, sea cual fuere la forma en que fue procreado, tiene las mismas chances de advenir como sujeto.Al fin de cuentas, eso es lo que debe ser considerado en una consulta por un niño: no solamente quién es el paciente, sino qué es lo que se transmitó de generación en generación a través de muchas generaciones de una familia.Cómo se conservó esto, también, cuántas versiones tuvo , ya que a eso el neurótico le responde con un mito individual.

Retomando , entonces, podemos decir que , desde el Otro actual contemporáneo se favorecen ciertas coartadas que facilitan la posición renegatoria de la castración.Esto retroalimenta el hecho de que el sujeto está siempre está siempre dispuesto a creer en la consistencia del Otro como sede de todas las respuestas o de todo el goce.Contrariamente,el acto analítico apunta al reconocimiento de un sujeto deseante en la demanda que nos dirige el padecimiento humano , y sabemos que éste cambia con la época.La lógica de la globalización también atraviesa a los analistas.Y ante un mundo tan cambiante, con una tendencia tan totalizadora, no debería el Psicoanálisis limitarse a trabajar sobre la singularidad del sujeto en el caso por caso,porque ¿ se apropia el Psicoanálisis del espacio que ofrecen los interrogantes sobre las estructuras colectivas?¿podrá constituirse una vez más en la instancia que de cuenta del malestar al que la civilización está confrontada actualmente? Es esperable que el Psicoanálisis no retroceda ante los enigmas con que nos enfrentan los significantes de la cultura actual. Yo creo que debería salir de los claustros ( universitarios o sindicales ) formadores de analistas para acercarse a todos los ámbitos de la polis promoviendo la apertura del movimiento subjetivo : primer paso para desalienarse de la cultura de la mortificación.

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